jueves, 29 de noviembre de 2018

Desafío

Resultado de imagen para hombre misteriosoEl dolor en tristeza se convierte
y la tristeza cambia de matiz
buscamos que el demonio no despierte
sosteniendo un recuerdo más feliz.

Nuestra sangre, dolida, ya se vierte
al secarnos el alma de raíz.
La vendetta reclama que se acierte
el golpe dirigido a la cerviz

sin miramientos, pena ni clemencia.
El dolor de mi hermano es incentivo
para pronta venganza en advertencia...

¡Que agradezca seguir estando vivo!
Con mi mano ejecuto la sentencia:
su rostro yacerá contemplativo.

Autor: Jorge de Córdoba

Tuviste el valor de lastimar a mi hermano;
ahora tendrás la ocasión de resarcirte.
Búscame… o te encontraré.

sábado, 8 de septiembre de 2018

Diálogo entre un vengador y su dios

Tu "ojo por ojo" tiene un gran error:
condena la vendetta, al vengador,
en vez de disuadir a los ladrones
y asesinos. Tu quitas y tu pones.

¡Estás equivocada cruel y ególatra,
deidad! ¡Somos un mundo tan idólatra...!
que todos mal seguimos un ejemplo:
Resulta que tumbamos a tu templo

que vive en ruinas: piedras y mortajas.
Tu, que subiste al cielo; nunca bajas...
y seguimos rompiéndonos la testa
en tu nombre. Tu fe, mi amigo, apesta.

Autor: Jorge de Córdoba

lunes, 27 de agosto de 2018

Última decisión


Su mirada, repleta de vacíos,
sus vacíos, enfermos de quimeras.
Ni los cuerpos inertes son tan fríos
como un alma sin luz en sus hogueras.

El hombre suspiraba su lamento
y pedía con lágrimas la muerte.
Me rogaba abatir su sufrimiento
y cortar un dolor, agudo, fuerte.

Sostenía la soga entre sus manos
y preparaba el nudo de justicia.
Sus cabellos, crispados y entrecanos
mostraban su saber y su pericia.

No podemos juzgar lo decidido
por un hombre sin deudas ni pendientes.
Encontrará, en su paz, lo ya perdido
buscando nuevos soles sin orientes.

Autor: Jorge de Córdoba

martes, 21 de agosto de 2018

Nosotros, los locos


Nos, los descerebrados, los apóstatas...
los locos expulsados del beaterio,
aquellos que cuidamos nuestras próstatas
y fuimos como sal de cementerio.

Nosotros, los malditos penitentes,
que siempre preferimos la demencia
a vivir en silencios repelentes
dictada por un clero en decadencia.

Nosotros que caemos desde lo alto
levantando las voces restringidas,
Igualamos al loco, que en un salto,
encuentra lo que ofrecen nuevas vidas.

Autor: Jorge de Córdoba

sábado, 18 de agosto de 2018

La memoria y la venganza


El inicio y final de la madeja
se tuerce, se me entierra y se desgaja.
Es un odio mortal que no me deja
respirar, como estaca que se encaja

La memoria, no muere ni se aleja;
al contrario: se afila como laja
inyectando el veneno de una abeja
y siendo tan ligera como paja.

El calendario pasa y se deshoja.
Se muestra, nos envuelve y no cobija...
nos ahoga, reclama y nos estruja

La memoria es la sangre, cuasi roja,
que se filtra en el alma más prolija
y nos lleva a vendettas, nos empuja.

Autor: Jorge de Córdoba

viernes, 3 de agosto de 2018

Lapidamos nuestra identidad


Amigos enterrados por doquier...
astillas que lastiman nuestra piel.

Acaso somos parte de un infierno
mojado en un pantano con su cieno ...

O tal vez, susurramos estertores
de antiguos legionarios y blasones

desdibujados, quietos. Ya vencidos.
Cerramos tantas llaves, tantos grifos

que lapidamos nuestra identidad
al catar el sabor de mala sal.

Autor: Jorge de Córdoba

viernes, 20 de julio de 2018

Es hora de cumplir


Para quienes sabemos demasiado
en un mundo de deudas por cobrar...
para quienes nos hemos extraviado
con los pasos de arena sobre el mar.

Para quienes jalamos del gatillo
y dejamos que el verbo construyera
sin cimientos el fuerte y el castillo...
para quienes servimos de escollera.

No encontramos la forma o la salida
que permita seguir bajo resguardo.
Es un riesgo seguir con esta vida...
es tiempo de cargar con nuestro fardo.

Autor: Jorge de Córdoba

martes, 17 de julio de 2018

Las canoas ya no reman


Adoloridos músculos se queman
en tanto los pulmones con neoplasia
invitan lentamente a la eutanasia
y todas las canoas ya no reman.

Las células del vientre me blasfeman
pugnando a que termine la teocracia
y cierre este capítulo en falacia
mientras que las canoas ya no reman.

Escupo necedades que persisten
y pugnan continuar con su jornada...
sin embargo, los miembros no resisten
y se rinden a un todo en una nada.

Casualidades cruentas que no existen
alentan una bomba ya cansada.

Autor: Jorge de Córdoba

miércoles, 23 de mayo de 2018

Con la soga al cuello


Me pregunto Raquel si mi país
levantará la testa todavía.
Parece que tropieza con hachís
y se acuesta en los rieles de la vía

esperando no ver las consecuencias
de tantos conformismos obcecados.
Parece que buscamos penitencias
por los torpes intentos de pecados.

¿Qué te puedo decir de tanto drama?
El gusto de mi México es volar
amarrado del cuello a una rama...
pretendiendo fingirse un escolar

Autor: Jorge de Córdoba

jueves, 17 de mayo de 2018

Que lo perdonen los curas


Después de perder la perspectiva
pregunté a las deidades
¿A mi hijo por qué?
¿Por qué a un alma tan viva
le cortaron las edades?
y ahora no siente, no respira, no ve.

Quisieron confundirme
y recitaron las mismas directrices
que se proclaman desde antaño.
En este piso firme
sucumbieron los venados y perdices,
la esperanza, la piel y el paño.

Mi hijo yace muerto
y mi derecho de padre
clama su vendetta.
En otra costa y en otro puerto,
ya sin perro que me ladre,
saciaré mi sed con la sangre de su veta.

¿El perdón?...
¡Yo perdoné al asesino…
pero nunca al comprador!
Sus sesos en el paredón
son testigos: hoy termino
mi tiempo de vengador.

Por otro lado…
Que lo perdonen los curas…
¡Que para eso son!
Su muerte se ha consumado
a las duras y maduras
con mi filo y mi blasón.

Autor: Jorge de Córdoba

miércoles, 9 de mayo de 2018

Viejas rentas


Aprendimos de falsas historietas
vertidas en los libros escolares.
Dijeron que no sirven las cometas
ni los sueños nacidos en versares.

Nos mostraron la rápida salida
que regala vivir a lo callado.
Así que confundimos la caída
con la muerte del pueblo mancillado.

Impusieron memorias fraudulentas
que creímos, que dimos por sentadas,
pues seguimos pagando viejas rentas
por lerdos y cobardes redactadas.

Autor: Jorge de Córdoba

lunes, 16 de abril de 2018

Madres abatidas


Se escuchó el estertor de las promesas
y antiguos juramentos. Las personas,
vestidas con la seda de las monas,
robaron la comida de las mesas.

Las muertes, convertidas en suicidios,
plagaron las noticias en los diarios
y de pronto, los viejos sedentarios,
vaciaron reclusorios y presidios.

Confundimos disparos con canciones
y las lágrimas fueron reprimidas...
Muchas madres quedaron abatidas
por las balas, sujetas con listones.

Autor: Jorge de Córdoba

viernes, 9 de marzo de 2018

Maldito nueve de marzo


Maldito viernes nueve, cruel, de marzo...
El recuerdo profano me lacera
derramando mi cuerpo por la esfera
con un mundo atrapado tras un zarzo.

Las esquirlas no suenan, pero duelen
todavía. Disparos... percusiones
que resultaron tristes defunciones
y logran que los ángeles no vuelen.

Este día recuerdo lo innombrable
y la escena se muere de vergüenza.
El alma se desgarra y se me trenza
trozando nuestra carne con un sable.

Autor: Jorge de Córdoba

martes, 13 de febrero de 2018

Sin sangre, sin rabia


La sangre en sus muñecas lo delata
como un testigo cauto y clandestino.
Elixir de la copa en desatino
que poco a poco escurre mientras mata.

Redimido de todos sus pecados
cumplió con la vendetta y la consigna.
Se mofa de la gente que persigna
sus cuerpos abatidos, desgastados.

Respetó al asesino en su refugio
y por ello esperó por tantos meses.
Hoy segamos su vida con las reses
cuando salía oculto en artilugio.

El vengador sacude su ropaje
y cumplida su manda de promesas
vuelve con su familia y casa, ilesas;
sin polvo, sin la rabia, sin coraje.

Autor: Jorge de Córdoba